jueves, 24 de diciembre de 2015

New York, canas y dinero

Parece que el 2015 se despide con tres hitos a alcanzar recién alcanzados en mi vida.

Nueva York era una asignatura pendiente desde que vi por primera vez "Un día en Nueva York", "Tu y yo", "Desayuno con diamantes", "Calle 42" , todas las de Woody Allen  de cuando era el primer Woody Allen y tantas otras!! Tengo un encargo pendiente a una tal Antía que escribe de cine en la Voz de Galicia y de eso sabe mogollón...la lista de las 10 mejores pelis rodadas todos los tiempos en NY, alá, lanzo el guante! :-)

Hasta en el avión de ida vimos "Aprendiendo a conducir", la penúltima de la Coixet que no puede ser más neoyorquina, la protagonista parece extirpada de una de las del citado Woody!

Como no podía ser de otra manera me gustó mucho. Me gustaron sus acera reparcheadas y pisoteadas por gente diversa y variopinta, de los de que de cada 10, 8 son diferentes entre sí: de color de piel, de cultura, de todo excepto en lo esencial; que son neoyorquinos, y esos les hace mucho más parecidos entre sí que entre los de su propia cultura de sus lugares de origen respectivos.

Me gustó que te puedas encontrar una tetería japonesa especializada en poder acariciar los gatos que tienen a disposición para ser mimados e incluso adoptados mientras te tomas tu té verde con pastelitos (también verdes) japoneses. Los gatos no eran verdes.

Me gustó que una larga retahíla de personas adultas y cool estén haciendo cola en una gélida y ventosa esquina para subir a un loft lleno de globos rojos enormes para jugar con ellos como si fuera un inmenso parque de bolas de adultos.

Me gustó caminar por el puente de Brooklyn de acero, madera y hierro, me gustó el perfecto art decó del Chrysler y desde luego me encantó ver anochecer y encenderse paulatinamente todas las lucecitas doradas y parpadeantes cual estrellitas de purpurina a mis pies desde la ventosísima azotea del Empire State.



No me gustó que comer sea malo, caro y con platos y vasos de plástico, ni conseguí andar con el café eterno aguachirri y que me da acidez por la calle como una genuina neoyorquina sin tirarmelo por encima la única vez  que lo intenté.

Me gustó la cantidad de librerías geniales en las que pasar horas largas que se te hacen cortas.

Me encantó el espíritu de la Biblioteca Pública de Nueva York.

No me gustó que la gente pobre es muy pobre y está muy sola y no puedan ni ir al baño de los bares porque éstos tengan códigos de acceso al wc que solo te aparece en el tiquet de compra. Ni me gustó el olor a pipí de rata del metro. De rata por decir algo.

Me sorprendió lo cutre que son en general los servicios públicos (léase buses, metro, alumbrado, aceras, sistema de recogida de basuras) y lo tercermundistas que son con el claxon los coches sobretodo en las zonas más saturadas del centro, pitando de modo gratuito y sostenido (y molesto, muy molesto).

En definitiva, que aunque caminamos mucho quedaron cosas por ver, así que habrá que volver. Hito conseguido pero revalidado ;-)

Canas

Este hito no me gusta nada, no lo tenía presente (como todo lo que a nosotros no nos pasa por el mero hecho de que a MI ESO NO ME PASA, y luego a TODOS nos acaban pasando tarde o temprano, en un ejercicio de democracia demoledora). Ha sido como una explosión. Me empeño en pensar que es fruto de un par de meses de estrés pero cabe la posibilidad de que sea un tema relacionado con la edad. Y es que una, a lo tonto a lo tonto, va haciendo años! Y por aquello de irse haciendo a la idea yo ya hace unos meses que me veo como el euro, redondeándome hacia arriba siempre, con lo que ya me doy por llegada a ala cuarentena. Así cuando llegue, que aun falta un buen año y medio me pareceré una bollicao. Eso en caso de haberme conseguido teñir claro.

El caso es que un día me fijé (miento: no me tuve que fijar, se me metieron en el ojo cual pestañas insolentes entre el párpado y el globo ocular) un porrón de canas. Si fuera un mechón sería sexi, como el de Morticia Adams, que me parece de lo más atractivo, o la mala malísima villana Cruella de 101 Dámlatas con Glenn Close. Pero no. Es una aquí, una allá, otra más acá, a lado y lado y en lo que sería el flequillo de llevarlo. Un drama vaya! Encima son como grises, no son blancas, que dirías que pudieran parecer más limpitas, no, es como cuando se funde la nieve y se queda llena de humo de los coches. Terrible.Y me hace vieja claro. Eso es todavía más terrible que el color nieve sucia.

De hecho más que que me haga vieja es que SOY mayor (no vieja). El problema principal radica en que yo vengo pensando, como Serrat, que "fa 20 anys que tinc 20 anys" (hace 20 años que tengo 20 años). Y claro, va a ser que no. Parece que esté haciendo coña pero hablo muy en serio! De verdad creo que tengo 20 años. Y claro, lo de las canas con 20 años es tragedia. Aunque tengo una amiga que ella y yo y nuestro círculo íntimo ya sabemos quien es que ella si lleva 20 años con canas!! Pero mira, a golpe de tinte lo ha conseguido disimular perfectamente!

Así que como soy nueva en esto de tapar canas e ignoro si con mechas vale o hace falta tinte (porque evidentemente descartamos el rollito soy-una-mujer-madura-y-profunda-y-segura-de-di-misma-que-no-pretende-ocultar-mi-edad-porque-la-cana-y-la-arriga-es-bella) y ayer me dediqué con mi hija pequeña a hacer como hacía yo cuando también lo era de ir poniendo un mechón mío en todos los mechones de pelo artificial teñidos del estante de los tintes. Volví a comprobar que el mío natural (sin canas) es el aburridísimo y de mal agüero "rubio oscuro ceniza" y el suyo un precioso castaño caoba. Luego jugamos a escoger el que más nos gustaba. Me imaginé pelirroja, castaña, con el pelo negro, rubio platino a lo Marilyn....al final acabé concluyendo que lo más sensato sería volver al "rubio oscuro ceniza" entre otras cosas porque con el rollo ceniza lo de las canas creo que se camuflan mejor que pongamos por caso un negro azabache.

Así que con estas estamos!!  Hito conseguido aunque no querido. Hito concatenado: ir a la pelu a que me arreglen el desaguisado (def: hecho contra la ley o la razón, veis?). A ver si para el 2016 ya he conseguido ir, pronto hará un año de la última vez que fui!! si de mi dependiera el sector...


Dinero


Este hito ya me gusta más! Guarda alguna relación con las canas porqué parte del estrés se lo debo a haber acabado los dos últimos meses pencando junto todo lo que no he podido en 4 años por motivos ajenos a mí y relacionados con algo de una crisis que se comenta por ahí.

Todavía tengo la cuenta pelada (aunque sin deudas a mi honra! -al menos de las que cobran intereses-), pero en cuanto facture (y cobre, detalle importante) podré volver a caminar a sabiendas de que existen tiendas en las calles, que son unos sitios donde a cambio de algo que llaman dinero y que abrevian aquí así: € y en NYC así $ puedes llevarte todo tipo de objetos de deseo, incluso sin contenido proteico, que eso si lo he ido viniendo intentándolo adquirir para no malnutrir a mi familia y no provocar a los servicios sociales.

Eso significa que si veo un pañuelo bonito me lo podré comprar o unos pendientes, o un restaurante caro, o incluso puede que hasta tenga suficiente para ir a la pelu a taparme las canas provocadas por lo mismo que me permite ir a la pelu y me las ha generado, hay que joderse con los círculos viciosos!

Este hito nunca es definitivo (especialmente entre los de mi especie free lance, o profesional liberal, o autónomo de toda la vida, como guste). Pero tras 5 años de penurias económicas poder tener un respiro y hasta incluso poder dejar trabajos de supervivencia de un lado para centrarme en lo mío me da una alegría. Porque las penas, con pan lo son menos.

Así que hito conseguido por un razonable periodo de tiempo (cada cual que se apañe con su razonabilidad (palabro?), la mía me la sé yo y me temo que es algo escasa, pero algo es algo, menos da un peine y a las penas puñaladas (este no va aquí, pero me quedaba bien otro refrán para terminar y no se me ocurría ninguno!).

Creo que puedo dar por razonablemente bien cerrado el 2015 a pesar de los pesares, las canas y las penurias. Como decimos en catalán (y puede que también en castellano):

Tot va bé si acaba bé!

Salut, alegria i consciència!

Bon nadal!

No hay comentarios:

Publicar un comentario